Una de las obras más frecuentes en el ámbito del hogar es el cambio de suelo. Es normal que con el trasiego de personas poco a poco el suelo vaya perdiendo su belleza natural, hasta que llega un momento en el que hay que contratar a una empresa de reformas para cambiarlo. Así, resulta interesante conocer los distintos tipos de suelos para casa que existen, teniendo en cuenta sus características y ventajas.
- Baldosas
Las baldosas son un tipo de suelo muy popular, especialmente en zonas de climas cálidos. Su principal ventaja es su larga vida útil. Además, las baldosas son muy fáciles de mantener ya que para su limpieza es suficiente con pasar un trapo húmedo. Se pueden instalar en cualquier espacio de la vivienda ya que tienen una gran resistencia al tránsito, así como a los rayos solares y a la humedad. Actualmente la variedad de baldosas disponibles en el mercado es muy amplia, de modo que es sencillo encontrar aquellas que mejor se adaptan a los gustos y preferencias personales.
- Madera natural
La madera natural es el tipo de suelo preferido por muchas personas debido a la gran calidez que ofrece. Se adapta de forma precisa a todos los estilos de decoración y resulta muy agradable al tacto. Sin embargo, para que el suelo de madera natural luzca siempre como el primer día es necesario un mantenimiento exhaustivo. Aunque nunca ha sido una opción recomendada para la cocina y el baño, actualmente existen tratamientos anti-humedad que permiten la instalación del parquet en estas estancias.
- Piedra natural
Respecto a la piedra natural, hay una gran selección de opciones disponibles en el mercado: mármol, granito, pizarra… El principal beneficio que ofrecen es que son muy resistentes, de modo que se puede instalar este tipo de suelo en espacios interiores y exteriores. La arenisca es una excelente opción para el baño ya que tiene propiedades antideslizantes.
- Suelo de vinilo
El suelo de vinilo es uno de los más económicos de todos, razón por la cual muchas personas apuestan por él a la hora de cambiar el suelo de casa. Su instalación y posterior mantenimiento son muy sencillos. Además, hay modelos muy decorativos en el mercado. El principal problema que presenta es que no tiene una gran capacidad de resistencia, por lo que no es la solución más adecuada para lugares de mucho tránsito.
- Tarima flotante
La tarima flotante está más de moda que nunca. Su instalación es muy sencilla de la mano de profesionales ya que son láminas que van unidas entre sí, como un puzzle. Imita a la perfección la madera, de modo que la diferencia entre ambos tipos de suelo es prácticamente imperceptible a simple vista. No obstante, la tarima flotante es mucho más resistente a los cambios de temperatura y la humedad.
- Hormigón
El estilo industrial es tendencia en la sociedad actual, por lo que cada vez más personas eligen los suelos de hormigón para sus viviendas. Una propuesta que se caracteriza por su gran resistencia. Además, se puede instalar sobre cualquier suelo ya instalado, y no existe ningún riesgo de filtración porque el suelo es completamente liso. Respecto a la estética, es posible obtener diferentes tonalidades.
Estos son los diferentes tipos de suelos que puedes instalar en tu casa. Cuál de ellos elegir dependerá de una serie de factores, como la zona climática en la que vives o el estilo de decoración de la vivienda. Lo más importante es que contrates a una buena empresa de reformas, que garantice la calidad de los materiales utilizados y que tenga una gran experiencia en la instalación de suelos.