Si quieres que la reforma de la cocina sea todo un éxito, hay algunos errores que debes evitar, como por ejemplo no pensar en el almacenamiento o no elegir adecuadamente el material de la encimera.
Dejarse llevar por las tendencias
Tener en cuenta las últimas tendencias en las reformas de cocina no está mal, siempre y cuando sepas aplicarlas a las características de tu cocina y a tus propias necesidades. Este 2022 el mármol negro es uno de los materiales que más se lleva no sólo para encimeras, sino también para suelos e incluso paredes. Sin embargo, si tu cocina es pequeña y no tiene buena iluminación natural, no es la mejor de las ideas porque se va a ver más pequeña y oscura de lo que ya es.
No tener en cuenta el triángulo de trabajo
Más allá de la estética, a la hora de reformar una cocina hay que valorar la funcionalidad. La distribución es clave, y el triángulo de trabajo consiste en tres líneas imaginarias que forman esta figura geométrica entre el grifo, la zona de cocción y el frigorífico. No debe haber más de tres metros entre cada vértice del triángulo y siempre hay que colocar zonas de preparación entre cada vértice. Lo más importante es que no haya ningún tipo de obstáculo entre los tres vértices.
No pensar en el almacenamiento
Para mantener la cocina en perfecto orden, es requisito indispensable contar con un espacio para guardar cada cosa en su sitio. En la reforma, hay que aprovechar cada centímetro disponible como espacio de almacenamiento. El hueco debajo del fregadero es muy útil para guardar útiles de limpieza. Para las ollas y sartenes, conviene instalar caceroleros. Por supuesto, los cajones grandes son imprescindibles, los cuales se pueden dividir en varios compartimentos con separadores o cestas.
No elegir un buen material para la encimera
Una de las zonas de la estancia que más vas a utilizar en la cocina es la encimera, así que es importante que escojas una de buena calidad y que se adapte a tus necesidades, valorando la estética, la funcionalidad y la durabilidad.
Las encimeras de silestone son una de las mejores opciones que existen. La superficie no es porosa y, además, es muy resistente a todo tipo de manchas. Al estar compuesto en su mayor parte de cuarzo, la vida útil es superior a la media. A esto hay que sumar que hay diferentes texturas para elegir: pulido, volcano o mate.
Las encimeras porcelánicas también son muy aconsejables porque resisten muy bien a las altas temperaturas, los golpes y los arañazos. Además, es un material no poroso, así que la limpieza es muy sencilla. En cuanto al diseño, este tipo de encimeras se pueden adaptar para tener un efecto de imitación a otras superficies, como la madera.
No controlar las instalaciones
En el caso de las reformas integrales de cocina, es muy importante aprovechar la obra para comprobar que todas las instalaciones, de fontanería, gas y electricidad, funcionan correctamente. De lo contrario, aunque el presupuesto aumente un poco, conviene renovarlas. Además, si se van a redistribuir los elementos de la cocina, hay que planificar la colocación de las tuberías al mismo tiempo que se establece la nueva disposición.
No planificar la iluminación
Y, por último, al igual que en cualquier otra estancia del hogar, la iluminación es clave. Lo mejor es poner luces de techo empotradas con varios focos de luz LED. Las luces perimetrales con tiras de LED también funcionan muy bien. Otra opción son las lámparas de pared, que son muy decorativas y ayudan a crear un ambiente acogedor.