Los cuartos de baño y aseos son las estancias más reformadas en los hogares en los últimos años. Los motivos son muy variados: ajustarse a las últimas tendencias de diseño, ganar espacio y almacenamiento o ganar comodidad son algunos de ellos. Y las reformas más habituales están relacionadas con ellos.

Cambio de bañera por plato de ducha

Podríamos decir que se trata de la reforma estrella en nuestros baños. La sustitución de una bañera por un plato de ducha es una mejora habitual, sobre todo cuando se busca comodidad en hogares donde viven personas de edad avanzada o con movilidad reducida ya que el acceso a la ducha se simplifica mucho.

Además, las últimas tendencias de baño apuestan por las duchas con efecto relajante: grifos de efecto lluvia, paredes y platos de ducha de efecto y tacto natural, mamparas de cristal transparente para una visibilidad y luminosidad total. Las duchas aportan a nuestros baños comodidad y practicidad para el día a día además de un estilo abierto que da una sensación de amplitud, sobre todo en los cuartos de baño más pequeños.

Colocación de bañeras de hidromasaje

Sin embargo, a pesar de que hay quienes quieren perder de vista las bañeras, hay también quienes se apuntan a recuperar las bañeras de hidromasaje. Esta tendencia ha ganado adeptos a raíz del confinamiento por la pandemia y tiene su origen en las horas que hemos tenido que pasar en casa y en la intención por pasar más tiempo de calidad en nuestros hogares.

Gracias a una bañera de hidromasaje conseguirás un efecto SPA en casa. Podrás tomar un baño relajante y desconectar del estrés diario. Además, si tienes la suerte de tener un baño amplio podrás combinar tu bañera de hidromasaje con una ducha para ganar rapidez y comodidad en el día a día.

Mejorar el aislamiento

Otra reforma habitual en los baños es la relacionada con el aislamiento. El baño es la habitación de la casa donde mayor humedad se produce. Si a esto le sumamos que en muchos hogares los baños no tienen ventanas al exterior, nos encontramos con baños en los que se acumula humedad que puede traspasar a otras habitaciones de la casa o puede generar moho en el interior. Por este motivo, dotar al baño de un aislamiento y unos materiales adecuados es una reforma de mantenimiento básica ya que, con el tiempo, pueden suceder estos problemas con mayor probabilidad y es casi imprescindible ponerles remedio de una forma eficaz.

Lo más habitual suele ser reforzar o reparar el aislamiento de la fontanería para arreglar o evitar fugas, retirar las baldosas para colocar un aislante interior en las paredes, eliminar humedades de suelos y paredes o colocar sistemas de extracción que pueden funcionar cada vez que se enciende la luz o de forma independiente para eliminar la humedad y también los malos olores.

Renovar los sanitarios

Aunque parezcan elementos atemporales, las modas en sanitarios también tienen mucho que ver en las reformas de baños. La llegada al mercado de los inodoros japoneses (con asientos calientes y agua para limpiarnos) son un buen ejemplo de ello.

Pero no son el único elemento que ha cambiado. Por ejemplo, los lavabos han evolucionado para cobrar mucha más importancia. Los antiguos lavabos de pie han sido sustituidos por muebles (perfectos para ganar en almacenamiento) sobre los que se colocan lavabos de diferentes formas (redondos o cuadrados), de diferentes colores (negros, blancos, grises) y de distintos materiales (cerámica, piedra, madera). Con estas tendencias los lavabos se convierten en uno de los puntos centrales de los baños y aseos más modernos.