Cuando pensamos en cambiar el aspecto de nuestra casa tendemos a imaginarnos grandes reformas: cambiar la distribución, instalar una ducha… Sin embargo, hay pequeñas reformas muy sencillas y rápidas de llevar a cabo y que pueden mejorar de forma notable la casa, tanto en el sentido estético como práctico. Por ejemplo, si notas que al baño le falta luminosidad porque el mueble es de madera natural en marrón, puedes apostar por un vinilo de color blanco para revestirlo.

Pequeñas reformas para mejorar tu casa

Pintar las paredes

Una de las “obras” más sencillas de hacer en casa es pintar las paredes. Si quieres ampliar visualmente los espacios, aportar luminosidad y dar sensación de limpieza, el blanco es una opción extraordinaria. Puedes apostar por las molduras, que son muy sencillas de color.

Tienes la opción de pintarlas en el mismo color de las paredes o en un tono más claro u oscuro de la misma gama para delimitar zonas. Por ejemplo, si tienes la cocina y el salón en un mismo espacio, puedes colocar molduras en el salón en color beige o marfil.

Por supuesto, si quieres darle un toque original y moderno a la casa, el papel pintado se convertirá en tu mejor aliado. Hay cientos de modelos disponibles en el mercado, para todo tipo de gustos y de estilos.

Cambiar los suelos

Quizá creas que cambiar los suelos requiere de una gran reforma en casa. Pero no. Actualmente existen suelos flotantes, que se montan como si fueran un puzzle y que puedes colocar tú mismo sobre el suelo que tienes ahora en casa. Si tienes un suelo de madera natural de color oscuro, de esta manera podrás darle luz y amplitud a las estancias. Elige un modelo de imitación madera en un tono claro, ¡y verás cómo el aspecto de tu casa cambia por completo!

Baño

El baño es una de las estancias más importantes del hogar en la actualidad. Si quieres darle un nuevo aire, puedes hacerlo de forma rápida y sencilla con los revestimientos vinílicos, que se aplican tanto en muebles como en paredes e incluso suelos. Se pueden instalar directamente sobre azulejos y baldosas sin que se aprecien irregularidades.

Otra gran idea es elegir detalles en dorado, uno de los acabados más demandados en la actualidad. Para conseguir un baño elegante y sofisticado, elige un revestimiento vinílico con efecto mármol en blanco e instala un grifo dorado.

En función del presupuesto disponible, también puedes cambiar el mueble y elegir uno suspendido de líneas modernas para aligerar la estancia. Por supuesto, cambiar la bañera por una ducha amplia siempre es una gran opción, tanto en el sentido práctico como estético.

Cortinas y textiles

Aunque la instalación de cortinas y la colocación de nuevos textiles no puede considerarse una reforma como tal, sí es cierto que cambian por completo el aspecto de una habitación. Las cortinas, además de aportar calidez, son perfectas para ocultar unas ventanas que se han quedado anticuadas. Los estores son un recurso fantástico, que permiten regular la entrada de luz y tienen un aspecto muy moderno.

En cuanto al resto de textiles, simplemente cambiando los cojines del sofá conseguirás darle un nuevo aire al salón. O, si quieres modernizar el dormitorio, puedes apostar por un edredón con estampado geométrico multicolor.

No hace falta tener un presupuesto muy elevado ni hacer grandes reformas para conseguir una vivienda 100% renovada, de acuerdo a tus gustos y a las tendencias de decoración más actuales. Ahora es el momento de ponerte en marcha, y conocer cuáles son las necesidades tu hogar.