Plantearse cambiar el aspecto de la casa dándole un acabado moderno es como empezar a crear una vida distinta en el ambiente donde se ha pasado un tiempo, quizá muchos años. Sin embargo, representa una decisión en la que se deben tener en cuenta algunos factores.
Como expertos en el tema podemos asesorarte de una manera práctica y conveniente, teniendo en cuenta el tiempo disponible y el presupuesto. Ambas exigencias son fundamentales para realizar una planificación que conlleve a lograr, con una pequeña reforma, un toque moderno a la casa.
Hablemos de reformar
Reformar la casa sabemos que plantea una tarea ingeniosa que terminará en un acto pleno de sorpresa: la imagen anterior será suplantada por una nueva. Esta impresión es el resultado de un esfuerzo en el que se invertido una buena parte de nuestro afán.
La planificación de una reforma demanda de lo siguiente:
- Tiempo: cuántas semanas necesitará la reforma.
- Tipo de obra: si la intervención es parcial o total.
- Presupuesto: el dinero que se requiere para comprar los materiales y pagar a los trabajadores.
Pensando en modernizar
Antes de empezar la tarea es preciso considerar los siguientes pasos:
- Asesoría: lo más conveniente es que recibamos asesoría de un arquitecto o de un decorador.
- Hacer una lista de materiales: este inventario nos permitirá contar con lo que se necesita.
- Contratar a los trabajadores: deben conocer plenamente el tema para no cometer errores ni derrochar el presupuesto.
Algunos consejos para generar cambios
Si lo que buscamos es modernizar áreas pequeñas, se pueden colocar, por ejemplo, escaleras en la parte interna que nos comuniquen hacia algún patio; o externa, si se dispone de un crecimiento hacia otro nivel de la casa. En caso de que existan varios ambientes es posible eliminar algunos y ampliar el espacio.
La decoración también juega un papel determinante en los cambios. En internet podremos encontrar trucos sobre cómo decorar. En ocasiones solo necesitamos dar una mano de pintura a una pared o cambiar las cortinas y ya empezaremos a notar que algo se ha transformado.
Otros consejos:
- En la cocina: recrear el mobiliario interviniendo la superficie de las despensas y aplicar una nueva pintura que nos dé una mejor iluminación.
- Salón principal: de una notable oscuridad, hemos renovado las paredes con pintura de color blanco y con ello ganamos luminosidad. Sustituimos los muebles y los nuevos los escogimos con colores que contrasten.
- El baño: incorporamos una nueva cerámica para dar un detalle alegre y pintamos en dos tonos con una pintura luminosa.
- Dormitorio: el de los niños, renovamos la pintura y pusimos nuevas cortinas a las ventanas; cambiamos la distribución de las camas y se redujo el mobiliario a uno más funcional. En tanto el de los adultos, igualmente, pintamos las paredes y las ventanas.
- Muebles: cambiamos el tapizado de los sillones, eligiendo colores claros y otra distribución del espacio, eso nos concede una renovación interesante.
- Comedor: podemos cambiar la mesa que por años nos ha acompañado, e incorporar una alfombra y con esto veremos algo distinto en este ambiente.
- Pisos: la cerámica de arcilla roja permite que los ambientes sean confortables y acogedores. Funcionan muy bien en la cocina y para incluir detalles de interés en la sala de baño.
Lo que nos queda ahora es ponernos a trabajar, para alcanzar la meta de poder modernizar nuestra casa con una pequeña reforma.